martes, 15 de noviembre de 2011

Una lista de comprobación del suicidio detecta a las personas en mayor riesgo

MARTES, 8 de noviembre (HealthDay News) -- La más reciente escala de calificación para determinar el riesgo de suicidio de una persona podría ser mejor que otras escalas parecidas para detectar a las personas que están en necesidad más urgente de ayuda, informan investigadores.

La Escala de calificación de la severidad del suicidio de Columbia (C-SSRS, por su sigla en inglés) fue desarrollada hace ocho años por profesionales clínicos, respondientes de emergencias y otros. El nueve estudio, que aparece en la edición den línea del 8 de noviembre de la revista American Journal of Psychiatry, respalda su uso mediante nueva evidencia.

Los investigadores que crearon la escala sopesaron su validez científica contra el Formulario de antecedentes de suicidio de Columbia, del cual surge la nueva escala, y la Escala Beck de ideación suicida, que se considera el estándar de excelencia de las herramientas de evaluación, señaló la autora del estudio Kelly Posner, directora del Centro de Evaluación del Riesgo de Suicidio de la Universidad de Columbia.

Posner señaló que una gran diferencia es que la C-SSRS mide un rango más amplio de conductas potencialmente suicidas.

"En el pasado, las personas [solo] habrían preguntado sobre los intentos de suicidio", señaló Posner, y añadió que "la escala identificó un rango de conductas, conductas preparatorias, como escribir un testamento, comprar un arma de fuego. Ahora tomamos esas cosas en cuenta. [Una persona] con apenas una conducta tiene de ocho a diez veces más probabilidades de acabar con su vida".

La "ideación suicida" es hablar o pensar sobre suicidarse. La escala tiene cinco grados de ideación, que van desde "deseo de estar muerto" hasta "ideación suicida activa con planificación e intención específicas".

"La escala de Beck apenas observa la ideación, y los antecedentes de la Columbia solo observan la conducta", mientras que la nueva escala califica ambas cosas, explicó Posner. "Delinea más claramente los tipos de pensamientos que debemos atender".

Posner dijo que la evaluación del riesgo de suicidio debe formar parte de toda consulta médica de rutina.

"Creo que se debe hacer. El 50 por ciento de las personas [que se suicidan] ven al médico de cabecera dentro del mes en que mueren", señaló. "Se trata de una crisis de salud pública, pero una que se puede prevenir. Necesitamos una mejor evaluación e identificación".

Es fácil incorporar la prueba en los ocupados consultorios, aseguró Posner. "Administrarla apenas se toma uno o dos minutos, y la versión de exploración puede consistir en apenas unas pocas preguntas. Reduce los falsos positivos y es menos oneroso que no hacer nada, cuando se plantean las preguntas correctas".

Health Canada, el departamento de bomberos y el sistema de escuelas públicas de la ciudad de Nueva York, el departamento de policía de Baltimore, la Guardia Nacional de EE. UU. y las Fuerzas Armadas israelíes se han capacitado en el uso de la C-SSRS o ya la usan, anotó Posner.

"Me llaman jueces en medio de casos. La usan para reducir hospitalizaciones e intervenciones innecesarias, de la misma forma que las escuelas la usan para redirigir recursos limitados a donde sean necesarios", señaló.

Para evaluar la C-SSRS, la encuesta se administró en tres estudios. En uno participaron 124 adolescentes que habían intentado suicidarse, y en otro participaron 237 adultos que acudieron al departamento de emergencias de un hospital por motivos psiquiátricos. El tercero fue un ensayo que evaluaba la eficacia de un medicamento en 312 adolescentes deprimidos. Los Institutos Nacionales de Salud de EE. UU. y la American Foundation for Suicide Prevention financiaron la investigación.

Lanny Berman, director ejecutivo de la Asociación Americana de Suicidiología (American Association for Suicidology), dijo que "el estudio es una adición valiosa a nuestra comprensión sobre la ideación y conducta suicidas. Sus hallazgos añaden peso a nuestra esperanza de que podemos medir adecuadamente de forma psicométrica las conductas que predicen los resultados que buscamos prevenir".

"Esta escala ayuda a lograrlo con los que nos informan que tienen ideación suicida", añadió Berman. "Dicho esto, una proporción significativa de los que mueren por suicidio niegan o no nos informan que están pensando en el suicidio antes de presentar una conducta autodestructiva, por tanto necesitamos mejores herramientas para evaluar el riesgo de suicidio sin depender de una ideación comunicada como punto de inicio de la evaluación".

Posner comentó que "algunas personas no lo comunican, sin importar qué se les pregunta". Pero "una mayoría de personas son francas cuando se les pregunta. El punto es que podemos identificar mejor a los que están y estarán en mayor riesgo".


Artículo por HealthDay, traducido por Hispanicare

FUENTES: Kelly Posner, Ph.D., director, Center for Suicide Risk Assessment, Columbia University, New York City; Lanny Berman, Ph.D., ABPP, executive director, American Association of Suicidology, Washington, D.C.; Nov. 8, 2011, American Journal of Psychiatry, online

No hay comentarios:

Publicar un comentario